¿Cómo añadir valor al envase?

Para realmente ofrecer algo más que un contenedor es necesario pensar en función del consumidor y ponerlo en primer plano. Resolver sus inquietudes, darle mayor satisfacción facilitando su tarea, proponer un segundo uso del envase, crear una utilidad, reducir la cantidad de residuos, etc.
Debemos lograr que los consumidores establezcan lazos emocionales y pasen, de apreciar la marca, a ser sus fans.

El secreto para estar en la mente del consumidor es generar recuerdos. Por ese motivo el diseño del envase tiene como desafío sorprender, y proveer nuevas maneras de relacionarse con el producto.
Utilizar un tipo de envase que es inusual para cierto tipo de productos podría ser una estrategia completamente válida.

La originalidad de un diseño puede consistir en utilizar recursos conocidos pero combinados de una manera distinta a la que conocemos. Nos debemos permitir jugar con los envases, sus formas, colores, texturas y materiales para asociarlos libremente y lograr nuevas propuestas que sean capaces de seducir a los consumidores, que cada vez son más conocedores y exigentes.

By: Tridimage

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